PENA DE MUERTE

Por: Fernando Kumara.

Muchos de mis hermanos desearían aniquilar a más hermanos y hacer las cosas “sencillas” y cómo alguna vez dijo mi Divino Maestro con esa gran frase “perdónalos Señor, porque no saben lo que hacen”. La mayoría de las personas desconocen el mundo espiritual y los motivos de porqué existen personas que ejercen ejemplos, venganzas y aprendizajes. Se les olvida a toda la gente que todos somos necesitados de amor y que no importa el dinero o la condición social. Cuántos de ustedes han sentido hambre, frío, deseos de cambiar la desigualdad en el mundo, robar o inclusive matar y hacerlo un hábito por un mendrugo de pan. Todos aquellos que señalan a los de abajo lo hacen de una forma cómoda, porque nacieron con oportunidades de una escuela, una cultura, un estatus social o una familia acomodada, sin más pensar que en su propia comodidad y ego. Se les a olvidado la COMPASIÓN de que la mayoría de esas personas son producto de un sistema económico desigual. Cómo me gustaría que todo funcionario de alto nivel, diputado, senador, alcalde, empresario se diera al trabajo social durante un año en servicio a un hospital de gobierno lavando baños, aseando enfermos, asistiendo a las casa hogares, o de adultos mayores para llevar más que víveres, alegría y abrazos de corazón; ayudando comunidades en extrema pobreza.

El Ser humano debería hacer uso de esa valiosa herramienta llamada CREATIVIDAD para re formular la forma en cómo ayudar y comprender, el cómo es que ellos ven el mundo. La justicia recuerden es ciega y como dicen en mi pueblo, “estamos todos en la casa de jabonero y el que no cae, resbala”. No juzgues pues si mi Padre no lo hace, porqué lo haría yo, no señales, porque desconoces la historia espiritual de cada individuo, esa que solo Dios conoce y el motivo por el cual se conduce de esa forma. Recuerda que existe la reencarnación científicamente probada y te pregunto qué sucedería si por obra del destino regresaras a está vida siendo marero o sicario.

Todo tiene una explicación y todo sucede por causalidad. Yo te invito a reflexionar y a orar por todo hermano necesitado, que en sus casas (si es que tienen) no falte un mendrugo de pan y la asistencia del Divino Maestro para su mejor y mayor bien. No quieras cambiar el mundo desde fuera, pues solo repetiremos errores superados en el pasado. Cambia el mundo en tu interior y termina de una vez con la injusticia, el odio, el rencor y resentimiento que habita ahí y que es ese pensamiento el que induce a pensar en la salida más “fácil” llamada pena de muerte. Con violencia solo generamos violencia, con amor e igualdad, generamos amor y cambio.

Dejo pues, esta reflexión en tu corazón y deja que tu corazón te diga la verdad y lo correcto que debemos hacer.

En Servicio estoy y en Servicio me encuentro, este humilde “Perergrino” a sus órdenes queda